Después de varias jornadas de temperaturas primaverales, la provincia se prepara para recibir un nuevo frente frío. Aunque se espera que el miércoles se registre una máxima de 23 grados, las condiciones cambiarán rápidamente con la entrada de una masa de aire polar.

Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), mañana por la tarde ingresarán vientos del sector sur con ráfagas de hasta 50 km/h, lo que provocará un notable descenso en las temperaturas mínimas.

Para el jueves, se pronostica una mínima de 6 grados y una máxima de 18°C, en una jornada que se prevé un cielo mayormente nublado y vientos persistentes del sur.

El viernes, sin embargo, será el día más crudo de la semana, con una mínima que podría llegar a los 0 grados. ¿La máxima? Será de 20 grados, un poco más elevada.

De igual manera, este frente frío obligará a los santiagueños a poner las frazadas sobre la cama y a sacar la ropa de abrigo para protegerse.

El pronóstico extendido