Este viernes, Boca Juniors regresó a la Argentina luego de su participación en el Mundial de Clubes 2025. El plantel que dirige Miguel Ángel Russo aterrizó en el país a las 13:00 y fue liberado hasta el martes 1° de julio, día en que se reanudarán los entrenamientos con vistas al segundo semestre del año.
En la previa del retorno, se había especulado con que algunos jugadores no viajarían de regreso con el grupo. Sin embargo, Russo fue contundente y exigió que todos regresaran "juntos", en un intento de bajar un mensaje de unidad tras días agitados dentro y fuera del vestuario.
El técnico logró su cometido y los 35 futbolistas que participaron del torneo en Estados Unidos volvieron en el mismo vuelo, incluyendo a nombres señalados por la crítica y la dirigencia. La decisión fue leída como una forma de evitar más roces internos y contener el conflicto que comenzó a tomar forma en medio del certamen.
Uno de los apuntados fue Marcos Rojo, quien discutió con Russo luego de haber sido suplente durante el Mundial de Clubes. En las últimas horas se había puesto en duda su regreso junto al plantel, pero el defensor se subió al avión. Aun así, todo indica que su ciclo en el club está cerca del final y su salida sería inminente.
En paralelo, los hinchas explotaron en redes sociales tras el empate sin goles frente a Auckland City, equipo amateur de Nueva Zelanda, y pidieron una renovación profunda del plantel. Algunos futbolistas fueron blanco de críticas y, según trascendió, la dirigencia evalúa una reestructuración importante de cara a la segunda mitad del año.
A pesar del clima tenso, Russo optó por darle unos días de descanso al plantel, una medida que no cayó del todo bien en los sectores más exigentes de la hinchada. El martes, cuando el grupo vuelva a entrenar, comenzará una etapa decisiva: el entrenador tomará decisiones clave sobre el futuro del equipo y definirá quiénes continuarán en la institución y quiénes deberán buscar nuevos horizontes.
Se viene una semana agitada en La Ribera, donde el foco estará puesto en las salidas, las posibles incorporaciones y la reconstrucción de un equipo que vuelve golpeado y con más dudas que certezas.