El papa Francisco sigue estacionario, pero mejorando de a poquito. Aunque ya retomó algunas actividades y se van sumando algunas leves mejoras de su frágil y complejo estado clínico, sigue con pronóstico reservado. “El Papa durmió bien durante la noche y ahora está descansando”, dijo este jueves su vocero, Matteo Bruni, en el habitual y escueto boletín de la mañana. Fuentes vaticanas dijeron más tarde que “continúa su terapia, hizo nuevos análisis y está de buen humor”.