Además de la amenaza escrita, los agentes encontraron una pistola Glock con municiones, que había sido escondida en un colchón. También se descubrieron varios pasaportes y documentos personales, junto con comprobantes de transferencias en dólares realizadas hacia La Libertad, Perú, el país de origen de “Pequeño J”.
Este último hallazgo es clave, ya que podría sugerir que el acusado tiene la intención de huir a su país natal tras los crímenes cometidos en Argentina. La policía también investigará los documentos y las transferencias para tratar de obtener más información sobre sus vínculos y posibles colaboradores.
El triple asesinato de Florencio Varela ocurrió bajo circunstancias escalofriantes, y “Pequeño J” es señalado como uno de los principales responsables del ataque. La policía ya había iniciado un operativo para dar con su paradero, pero su fuga, tras dejar esta amenaza de alto voltaje, ha complicado las investigaciones.
A medida que avanza la búsqueda, se han intensificado los esfuerzos para localizarlo, y las autoridades de varios países están colaborando para intentar frenar su escape. La gravedad de los crímenes y la amenaza que dejó escrita han provocado una creciente preocupación por su capacidad de evasión y su comportamiento desafiante.